Después de tres años de educar a más de 300.000 estudiantes y visitantes en el Centro de Ciencias Marinas de Tybee Island, la querida tortuga marina Ike ha sido liberada en el océano. El pasado sábado, decenas de ciudadanos de Tybee y alrededores acudieron a la emotiva despedida de Ike hacia su nueva vida en el Atlántico
Desde 2020, el Centro de Ciencias Marinas de Tybee Island ha sido el hogar de una tortuga marina llamada “Ike”.
Ike era un rezagado que no abandonó su nido tras eclosionar, así que el Centro de Ciencias lo acogió. Y desde el primer momento lo puso a trabajar como su “Embajador de Escombros” oficial. Su trabajo consistía en crear conciencia sobre la contaminación del agua. Sin embargo, el sábado vuelve a su hábitat natural en el océano Atlántico.
Despedida agridulce: Ike, la “tortuga marina de la pandemia” se despide después de 3 años
Williford, director de programas del centro científico, ha visto a Ike crecer desde que era un rezagado de 18 gramos en su nido. Hasta en la tortuga marina adulta de 64 libras que es ahora.
De acuerdo a los trabajadores del Centro de Ciencias Marinas de Tybee Island, la despedida fue un momento agridulce para todos. Ike, mejor conocido como la “tortuga de la pandemia”, llegó al centro en medio de la cuarentena, y se convirtió en el preferido. Ahora, emprenderá el viaje para reunirse con otros de su especie, no sin antes estar debidamente identificado.
Ike lleva tres marcas. 1 hace las veces de microchip y las otras 2 están en sus aletas. Estas últimas sirven para informar al Departamento de Recursos Naturales. Aunque no tiene rastreador por satélite, el centro científico cree que se dirige al Atlántico Norte.
“Así que probablemente va a hacer ese viaje a esa corriente de agua caliente. Hay montones de comida ahí fuera para él, montones de pequeños cangrejos nadadores, caracoles gamba, cangrejos herradura…”.
El centro científico empezará a ayudar a una nueva tortuga muy pronto.